UN VERANO CHINO
En este viajero de libro nuevo, Javier Reverte recurre la Porcelana de nuestros días de es en del oeste, de del norte en del sur y de del oeste en es, en un largo periple aquello comienza en Beijing y concluye en Shanghái. El autor, «mochilero para gusto», utiliza raíles, autobuses, tenidos y barcos, en un viaje en qué objetivos , entre otros sitios, en el Tibet; en el nacimiento, el curso y la boca del río Yangtse y en la villa dónde tiene nacido Mao Tse Tung. También a pesar de que es su hábito, Reverte hundirse en páginas de la historia del país cuándo estos le parecen emocionantes o interesantes. Y su mirada tranquila particular, extiende y perplexe delante del mundo impregna constantemente las páginas de este relat. La Porcelana de hoy constituye el paisaje de Un verano chino: un retrato en ocasiones toma de un país difícil del cual el futuro no es fácil de prever y del cual el pasado ha sido détrui casi para completo. Trata , además, de un libro cargado de sentido del humor que hará para reír en estallidos de risa además de una ocasión.
